La pretemporada de Macua
La mejora de las condiciones del contrato televisivo encabeza las prioridades de Fernando García Macua en el año electoral
Fernando García Macua tiene claros los ejes sobre los que debe pivotar su gestión durante el último año de su mandato como presidente del Athletic, una temporada «trascendente en muchas áreas» que desembocará en un proceso electoral a la conclusión de la campaña 2010-2011. El máximo mandatario rojiblanco, que se acercó el viernes a Isla Canela para visitar a la plantilla e intercambiar impresiones con el cuerpo técnico de Joaquín Caparrós, repasó ayer la actualidad del equipo y fijó las líneas maestras de su plan de maniobra de cara al siguiente curso. Las prioridades están perfectamente definidas por el abogado bilbaíno, delimitadas por una nítida jerarquía de criterios, estructura piramidal, y en lo más alto de la escala de las necesidades se localiza la inminente negociación del próximo contrato televisivo. Ibaigane pretende mejorar los ingresos actuales, que en absoluto se ajustan a la realidad de las audiencias del Athletic, sin perder de vista el desarrollo de San Mamés Barria y Lezama y, además, asegurar la continuidad de las principales figuras en el club, Javi Martínez y Fernando Llorente.
Macua reconoció que el Athletic afronta una campaña «muy importante», con varios frentes abiertos, y abogó por centrarse en proyectos que se encuentran en las «fases decisivas» de ejecución. Constató que el conjunto rojiblanco ha ido creciendo poco a poco, sin traumas ni situaciones límite, y escenificó la evolución que, a su juicio, ha experimentado la plantilla desde la llegada de Joaquín Caparrós. Alejar los fantasmas del descenso, primero, asentarse después y, por fin, crecer. «Ahora debemos confirmar que estamos en un ciclo ascendente», precisó en alusión al siguiente campeonato liguero. «La realidad del equipo respecto a otros años es evidente: en estos momentos, ningún socio se plantea como objetivo la permanencia». Las metas se han vuelto más ambiciosas, con un toque de nobleza, y los retos pasan por resolver una serie de aspectos clave que garanticen la estabilidad de la entidad.
El club se sentará en breve a negociar la cesión de sus derechos audiovisuales con vistas a las próximas temporadas. Los términos actuales son inaceptables para Ibaigane, que pretende mejorar de forma sustancial las condiciones económicas del contrato. Macua reveló ayer que, a 30 de junio, los ingresos del Athletic ascendieron a «61 millones de euros». Pues bien, tan sólo 17 provienen de la parcela televisiva. «Ya estamos en conversaciones con las operadoras», desveló el presidente, que trabaja codo con codo junto a otros clubes igual de descontentos por las políticas de reparto. Aumentar los ingresos, según el presidente, se antoja imprescindible para «dotar al club de una mayor estabilidad».
La Liga española es la que reparte de manera más desequilibrada el dinero de los contratos televisivos. Casi la mitad de la tarta se la 'comen' Madrid y Barça -140 millones de euros cada uno-, mientras que el Athletic, uno de los equipos más comprados en la modalidad de 'pagar por visión', apenas se estira hasta los 17. Hasta cobra menos que el Getafe (18), un club de apenas 10.000 socios, y sólo tres más que el Zaragoza (14) y el Deportivo (14). «Si somos el quinto o el sexto club más 'pinchado' -en referencia a la fórmula PPV-, lo más normal sería que ocupemos esa misma posición en el ránking de los ingresos», argumentó Macua. Ya tiene en mente una cifra, aunque evitó facilitarla para no contaminar el proceso negociador.
Macua avanzó que la liquidación del período anterior «va a ser muy ajustada», aunque auguró que arrojará un pequeño superávit. El presidente, que se encargó de despejar cualquier duda acerca de la situación económica del club y aseguró que todos los pagos «están al día», insistió en la importancia de seguir saneando las cuentas. «Este año hemos amortizado entre 5,5 y 6 millones de euros», una cantidad que se repite en casi todos los ejercicios fiscales de la actual junta directiva. El máximo dirigente de la entidad vizcaína apuntó que, en las últimas tres campañas, las mismas que lleva en el cargo, la amortización ha alcanzado los «18 millones», por apenas «tres» que efectuó el anterior equipo de gobierno en el mismo período.
La construcción del nuevo campo y el proyecto 'Lezama siglo XXI' ocupan un lugar preferencial en la agenda del club. Macua recordó que «nos ha costado tres años ponerlo en marcha, además del tiempo empleado por otras juntas directivas, pero las obras ya están en pleno funcionamiento», subrayó en referencia a los trabajos relativos a San Mamés Barria, la futura casa del cuadro bilbaíno. En cuanto a la estructura de la factoría rojiblanca, el presidente del Athletic se mostró partidario de otorgar una mayor independencia a la cantera.Es decir, conseguir que la fábrica vizcaína funcione como un organismo autónomo, ajeno a los procesos electorales e inquilinos de Ibaigane, a salvo de bruscos cambios de criterio.
Las cifras son importantes, también que cuadren los balances, pero lo que inquieta a la afición del Athletic es el presente y el futuro de Fernando Llorente y Javi Martínez. Dos jugadores esenciales dentro de la plantilla, campeones del mundo con España hace hoy una semana, futbolistas de muchos quilates que figuran en las agendas de los grandes de Europa, entre ellos el Real Madrid de Florentino Pérez y el Barcelona de Sandro Rosell. Macua lanzó ayer un mensaje tranquilizador y explicó que sólo hay una manera de que se vayan: «Que ellos quieran irse y que si viene alguien pague sus cláusulas al contado». A renglón seguido recordó las cantidades disuasorias de sus blindajes -36 y 30 millones de euros, respectivamente- y aclaró que no le consta que nadie esté dispuesto a afrontar semejante desembolso. «No hay nada de nada», zanjó.
El traspaso de Aritz Aduriz al Valencia ha puesto en alerta a los rectores rojiblancos, que aún esperan los 1,2 millones de euros que les adeuda el conjunto bermellón por el delantero. «Estamos estudiando la operación y tendremos más información en los próximos días», aseguró Macua. «El Mallorca está intervenido y la venta de activos debe pasar por una serie de controles. Nuestros servicios jurídicos lo están analizando y lo queremos verificar». El presidente del Athletic lamentó que la ley concursal «beneficie al infractor» -clubes por lo general sociedades anónimas- y solicitó la creación de unos «mecanismos de gestión preventivos» que protejan a los equipos que cumplen con sus obligaciones a rajatabla.
La mejora de las condiciones del contrato televisivo encabeza las prioridades de Fernando García Macua en el año electoral
Fernando García Macua tiene claros los ejes sobre los que debe pivotar su gestión durante el último año de su mandato como presidente del Athletic, una temporada «trascendente en muchas áreas» que desembocará en un proceso electoral a la conclusión de la campaña 2010-2011. El máximo mandatario rojiblanco, que se acercó el viernes a Isla Canela para visitar a la plantilla e intercambiar impresiones con el cuerpo técnico de Joaquín Caparrós, repasó ayer la actualidad del equipo y fijó las líneas maestras de su plan de maniobra de cara al siguiente curso. Las prioridades están perfectamente definidas por el abogado bilbaíno, delimitadas por una nítida jerarquía de criterios, estructura piramidal, y en lo más alto de la escala de las necesidades se localiza la inminente negociación del próximo contrato televisivo. Ibaigane pretende mejorar los ingresos actuales, que en absoluto se ajustan a la realidad de las audiencias del Athletic, sin perder de vista el desarrollo de San Mamés Barria y Lezama y, además, asegurar la continuidad de las principales figuras en el club, Javi Martínez y Fernando Llorente.
Macua reconoció que el Athletic afronta una campaña «muy importante», con varios frentes abiertos, y abogó por centrarse en proyectos que se encuentran en las «fases decisivas» de ejecución. Constató que el conjunto rojiblanco ha ido creciendo poco a poco, sin traumas ni situaciones límite, y escenificó la evolución que, a su juicio, ha experimentado la plantilla desde la llegada de Joaquín Caparrós. Alejar los fantasmas del descenso, primero, asentarse después y, por fin, crecer. «Ahora debemos confirmar que estamos en un ciclo ascendente», precisó en alusión al siguiente campeonato liguero. «La realidad del equipo respecto a otros años es evidente: en estos momentos, ningún socio se plantea como objetivo la permanencia». Las metas se han vuelto más ambiciosas, con un toque de nobleza, y los retos pasan por resolver una serie de aspectos clave que garanticen la estabilidad de la entidad.
El club se sentará en breve a negociar la cesión de sus derechos audiovisuales con vistas a las próximas temporadas. Los términos actuales son inaceptables para Ibaigane, que pretende mejorar de forma sustancial las condiciones económicas del contrato. Macua reveló ayer que, a 30 de junio, los ingresos del Athletic ascendieron a «61 millones de euros». Pues bien, tan sólo 17 provienen de la parcela televisiva. «Ya estamos en conversaciones con las operadoras», desveló el presidente, que trabaja codo con codo junto a otros clubes igual de descontentos por las políticas de reparto. Aumentar los ingresos, según el presidente, se antoja imprescindible para «dotar al club de una mayor estabilidad».
La Liga española es la que reparte de manera más desequilibrada el dinero de los contratos televisivos. Casi la mitad de la tarta se la 'comen' Madrid y Barça -140 millones de euros cada uno-, mientras que el Athletic, uno de los equipos más comprados en la modalidad de 'pagar por visión', apenas se estira hasta los 17. Hasta cobra menos que el Getafe (18), un club de apenas 10.000 socios, y sólo tres más que el Zaragoza (14) y el Deportivo (14). «Si somos el quinto o el sexto club más 'pinchado' -en referencia a la fórmula PPV-, lo más normal sería que ocupemos esa misma posición en el ránking de los ingresos», argumentó Macua. Ya tiene en mente una cifra, aunque evitó facilitarla para no contaminar el proceso negociador.
Macua avanzó que la liquidación del período anterior «va a ser muy ajustada», aunque auguró que arrojará un pequeño superávit. El presidente, que se encargó de despejar cualquier duda acerca de la situación económica del club y aseguró que todos los pagos «están al día», insistió en la importancia de seguir saneando las cuentas. «Este año hemos amortizado entre 5,5 y 6 millones de euros», una cantidad que se repite en casi todos los ejercicios fiscales de la actual junta directiva. El máximo dirigente de la entidad vizcaína apuntó que, en las últimas tres campañas, las mismas que lleva en el cargo, la amortización ha alcanzado los «18 millones», por apenas «tres» que efectuó el anterior equipo de gobierno en el mismo período.
La construcción del nuevo campo y el proyecto 'Lezama siglo XXI' ocupan un lugar preferencial en la agenda del club. Macua recordó que «nos ha costado tres años ponerlo en marcha, además del tiempo empleado por otras juntas directivas, pero las obras ya están en pleno funcionamiento», subrayó en referencia a los trabajos relativos a San Mamés Barria, la futura casa del cuadro bilbaíno. En cuanto a la estructura de la factoría rojiblanca, el presidente del Athletic se mostró partidario de otorgar una mayor independencia a la cantera.Es decir, conseguir que la fábrica vizcaína funcione como un organismo autónomo, ajeno a los procesos electorales e inquilinos de Ibaigane, a salvo de bruscos cambios de criterio.
Las cifras son importantes, también que cuadren los balances, pero lo que inquieta a la afición del Athletic es el presente y el futuro de Fernando Llorente y Javi Martínez. Dos jugadores esenciales dentro de la plantilla, campeones del mundo con España hace hoy una semana, futbolistas de muchos quilates que figuran en las agendas de los grandes de Europa, entre ellos el Real Madrid de Florentino Pérez y el Barcelona de Sandro Rosell. Macua lanzó ayer un mensaje tranquilizador y explicó que sólo hay una manera de que se vayan: «Que ellos quieran irse y que si viene alguien pague sus cláusulas al contado». A renglón seguido recordó las cantidades disuasorias de sus blindajes -36 y 30 millones de euros, respectivamente- y aclaró que no le consta que nadie esté dispuesto a afrontar semejante desembolso. «No hay nada de nada», zanjó.
El traspaso de Aritz Aduriz al Valencia ha puesto en alerta a los rectores rojiblancos, que aún esperan los 1,2 millones de euros que les adeuda el conjunto bermellón por el delantero. «Estamos estudiando la operación y tendremos más información en los próximos días», aseguró Macua. «El Mallorca está intervenido y la venta de activos debe pasar por una serie de controles. Nuestros servicios jurídicos lo están analizando y lo queremos verificar». El presidente del Athletic lamentó que la ley concursal «beneficie al infractor» -clubes por lo general sociedades anónimas- y solicitó la creación de unos «mecanismos de gestión preventivos» que protejan a los equipos que cumplen con sus obligaciones a rajatabla.
